miércoles, octubre 6

...

Se me quitó el hambre...
odio la muerte... odio que me afecte tanto.
Yo ni siquiera lo conocía. Él tenía cuarenta años, falleció ayer en un accidente, camino al hospital.
La imagen, la mera imagen; el choque, la velocidad de los eventos, el dolor, la máscara de oxígeno, los paramédicos, los tubos, los organos que fallan. Quizás llevaba consigo la comida que prepara para mi hermana y los demás todos los días...
Me digo q la gente muere a diario.
Me repito que "toda la energía es prestada y algún día hay que devolverla", pero esa idea no sirve.
Siento que cuando alguien muere hay algo descompuesto, algo sucio y malo.
Odio que la muerte me afecte tanto.

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